
El ecodiseño, clave para minimizar el impacto ambiental
octubre 20, 2025Cada noviembre, el Black Friday se convierte en un fenómeno global que impulsa el consumo masivo. Lo que nació en Estados Unidos como una jornada de descuentos previo a la Navidad, hoy mueve miles de millones en todo el mundo. Sin embargo, este modelo de compras rápidas y compulsivas tiene un alto coste ambiental y social: emisiones de CO₂, sobreproducción, residuos y transporte intensivo.
Frente a este modelo, surge una alternativa con una visión diferente: el Green Friday, una iniciativa que promueve el consumo responsable, la economía circular y la reflexión sobre nuestros hábitos de compra. Nació en 2015 como respuesta a la necesidad de concienciar sobre los impactos del consumismo y fomentar decisiones más sostenibles.
El impacto ambiental del Black Friday
El pico de consumo asociado al Black Friday genera una huella de carbono significativa. Cada compra tiene detrás un proceso de producción, embalaje, transporte y distribución que implica consumo de energía y recursos naturales.
Según datos de la ONU y organizaciones ecologistas, la industria textil —una de las más beneficiadas en estas fechas— representa hasta el 10 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero. Además, la corta vida útil de muchos productos tecnológicos y de moda contribuye a la acumulación de residuos y al aumento de la contaminación por plásticos y metales pesados.
El consumo digital también tiene un coste. El auge del comercio electrónico durante el Black Friday incrementa el número de envíos, la demanda logística y el uso de centros de datos, todos ellos altamente dependientes del consumo energético.
Del usar y tirar al reparar y reutilizar: el mensaje del Green Friday
El Green Friday busca revertir esta tendencia. No se trata de dejar de consumir, sino de hacerlo de manera más consciente, local y sostenible. Esta jornada invita a reparar, restaurar y reutilizar antes de comprar, fomentando el uso responsable de los recursos y la durabilidad de los productos.
Asimismo, cada vez más marcas apuestan por políticas de recompra, descuentos en productos reciclados o donaciones a proyectos de compensación de CO₂, alineando sus estrategias con la sostenibilidad.
El papel de las empresas ante el reto del consumo sostenible
Las empresas tienen un papel fundamental en esta transformación. Promover modelos basados en la economía circular, la educación ambiental y la transparencia es clave para reducir el impacto del consumo y construir una cultura corporativa sostenible.
Desde Grupo Silvoturismo, con más de 25 años de trayectoria en gestión ambiental, educación y comunicación sostenible, se defiende una visión empresarial donde la rentabilidad y el respeto por el entorno pueden coexistir.
La compañía aplica principios de ecodiseño, eficiencia energética y sostenibilidad integral en cada proyecto, integrando estos valores en sus certificaciones internacionales —como las ISO 14006 y ISO 20121— que avalan su compromiso ambiental.
Comprar menos, elegir mejor
El Black Friday puede ser una oportunidad para reflexionar sobre nuestras decisiones de compra y su impacto real en el planeta. Apostar por un consumo responsable no solo reduce nuestra huella ecológica, sino que también impulsa una economía más justa y sostenible.
En este sentido, el Green Friday simboliza el cambio de paradigma necesario para afrontar los retos del siglo XXI: menos consumo, más conciencia y más sostenibilidad.
En su 25 aniversario, Grupo Silvoturismo reafirma su compromiso con la educación ambiental y la transformación hacia un modelo económico más respetuoso con la biodiversidad, las personas y el territorio. Porque la sostenibilidad no se compra: se construye, cada día.




